Una alimentación a base de comida ultraprocesada atestada de harinas refinadas, azúcares libres y aceites vegetales de mala calidad (canola, maíz, palma, soja, girasol) no proporciona saciedad por su baja densidad nutricional, genera un ratio Omega-6/Omega-3 muy diferente al que nuestros genes esperan (debería ser como mucho 2,5/1 y la alimentación industrial hace que sea alrededor de ¡15/1!), provoca ansiedad y adicción al azúcar industrial y a los picos de glucemia que éste desencadena en nuestro organismo y, como consecuencia de todo ello, obesidad, diabetes, hipertensión, molestias gastrointestinales, inflamación crónica, depresión, Alzheimer… Leer más…